lunes, 9 de marzo de 2015



De los
PROCESOS DE CREACIÓN POÉTICA


<<para escribir es necesario no ser feliz>>
desde mi punto de vista, se ha mal interpretado esta frase - a la que muchos aluden como un escondite o incluso una justificación - ¿Para escribir se debe estar triste? ¿Para escribir se debe sufrir? ¿Es el sufrimiento una musa tan reverenciada que el propio poeta prefiere ahogarse en el dolor?
No estoy de acuerdo. 
Para mi jamás se escribe desde el dolor. Como tampoco se escribe desde la alegría, la tristeza, el miedo o la ira. Estamos demasiado ocupados en el dolor como para sentarnos a escribir. Y si lo hacemos ¿Que conseguimos? 
¿Un poema sobre el dolor? o ¿Un poema para nuestro dolor?
Me reitero en lo que ya dije varias veces: se escribe desde el recuerdo. No desde la tristeza cuando se está triste. Ni desde la felicidad cuando se está contento. Como la primavera no se ve mientras las flores están aún floreciendo bajo la tierra. 
Sólo podremos hablar del dolor cuando hayamos dejado atrás el dolor. Como sólo en la cima de la montaña se ve la distancia recorrida. Escribir mientras nos duele es regocijarse dentro de la herida, es huir del dolor hiriéndonos para que nos duela todo ahora, para sacarnos el dolor en el poema, para no enfrentarnos al dolor. Para no comprenderlo. Y solo conseguimos un dolor tan propio que hasta releer  el poema nos molesta. Un dolor egocéntrico. El poema será nuestra herida. Nada más. Un poema de autoayuda. Sólo eso. 

¿Y desde donde se escribe?
Se escribe desde el silencio. Se escribe a solas, incluso de ti mismo. A solas del dolor, de la alegría, del miedo, incluso del amor. Se escribe desde una sensación etérea y efímera, como si se estuviese durmiendo. Dentro y fuera de la realidad al mismo tiempo. Y en ese estado entre la vigilia y la poesía se escribe el poema, desde el recuerdo del dolor y no desde el dolor. Desde la alegría y no desde lo que nos hizo felices. Desde el miedo cuando se ha dejado atrás el miedo. 
Esa libertad nos junta. 
Y ya no escribimos para calmar nuestro dolor. Escribimos porque hemos comprendido el dolor, entonces somos capaces de alcanzar la atemporalidad en el poema y en ese momento habremos escrito poesia. 

lunes, 23 de febrero de 2015



De Los
PROCESOS DE CREACIÓN POÉTICA




En una entrada anterior dije que se escribe desde la experiencia y el recuerdo. Ya sea la experiencia de un sueño, de una fantasía, de un pasado,  incluso de un futuro. La poesía es atemporal. Pero siempre ha de escribirse desde la realidad. Aunque esta no sea real. 

¿Y como se traduce esa realidad? ¿Como se llega de la imagen a la palabra? ¿De la imagen a la imagen de la palabra? A veces las cosas parecen bellas cuando se las mira y sin embargo no cuando se las escribe. Y aunque no soy partidaria de la frase que dice: "Una imagen vale más que mil palabras", también es cierto que es complicado traducir el mundo con la palabra cuando la naturaleza se hizo en silencio. Pero lo hermosos del lenguaje es su versatilidad. Una hoja podrá ser bella una sola vez, de una única manera, la suya. ¡Pero la palabra puede convertirla en tantas cosas! El lenguaje nos otorga el maravilloso milagro de la creación. Y ahí está su osadía. En que todo puede ser cualquier cosa. En que todo puede decirse de innumerables formas. Y los poetas existen por la inmensidad de la palabra. 

Os pongo unos ejemplos para ilustrar este pensamiento, de dos grandísimos poetas: Neruda y Huidobro, para que veáis como actúa esta mágia que es el lenguaje:

Ambos poetas hablan de una hipotética ausencia de la amada. De qué pasaría si ella les faltase. La imagen, la realidad, es la misma. Comprobad aquí lo que hace grande a la poesía:


Pablo NerudaCien sonetos de amor

No te vayas por una hora porque entonces
en esa hora se juntan las gotas de desvelo
y tal vez todo el humo que anda buscando casa
venga a matar aun mi corazón perdido.


Vicente huidobro. Altazor

Si tu murieras
las estrellas a pesar de su lámpara encendida
perderían el camino
¿Qué sería del universo?













jueves, 5 de febrero de 2015

De los
PROCESOS DE CREACIÓN POÉTICA


El poema se teje y se desteje como si fuésemos una araña sonámbula que algún sueño aviva. Como si fuésemos el caracol que lleva a la espalda todo cuanto tiene. hasta caer sobre el papel en blanco, como el aullido del lobo cae sobre la luna. Para después comenzar a cortejar aquella idea, ¿Y como cortejar a la poesía. para que venga, para que se siente a nuestro lado con su silencio de luz sobre la tarde? porque nunca se deja cortejar de la misma manera.

Nadie nos dijo que escribir fuese fácil. Es comenzar a caminar sin saber muy bien a donde, ni cuanto tiempo, ni bajo que estaciones. Y sin embargo, cuando llegas, cuando terminas el poema y te levantas y sientes que has conquistado el universo, te das cuenta de que lo único que quieres es volver a empezar el siguiente viaje.

Para mi hay cierta adicción en el proceso de creación. La poesía no está en el poema, está en los borradores. Como el nacimiento no está en el hijo, si no en la gestación y en el parto.




miércoles, 4 de febrero de 2015

De los
PROCESOS DE CREACIÓN POÉTICA



Hoy escribí, como siempre, desde el recuerdo. No se puede escribir de otra manera. No se puede escribir desde el presente porque es torpe y cercano, como la ola que se levanta en la orilla y pierde el equilibrio del mar. No puede escribirse nada de esa ola que ha derrotado la tierra, si no de aquella ola distraía y sola que esquivó las islas hasta esta playa. 
Es necesaria la contemplación. Para tener un pasado desde el que nombrar el mundo. Y yo hoy recordé aquel río lleno de nubes - y esto puede parecer una metáfora, sin embargo es cierto - a veces un poema es sólo una verdad. Tal vez ningún verso sea nuestro. Tal vez sólo traducimos el mundo a nuestro idioma. 


martes, 27 de enero de 2015

De mis
CITAS CÉLEBRES


<<Tal vez la poesía no me dé de comer. Pero es de lo que quiero alimentarme>>
                                                                                                               Daisy Villalobos Leal

De los
PROCESOS DE CREACIÓN POÉTICA



A Rimbaud lo abandonó la poesía.  ¿Qué no hará conmigo?
Porque así como se escribe – como Pessoa – todo un poemario en una noche. La sequía poética puede durar unas horas, unos meses, unos años… Y a veces cuando la sed del lenguaje nos agrieta, y sientes que te han derrotado, como a una casa abandonada a la que se le rompe por primera vez una ventana, y el aire que primero libera el tiempo que perdió la cuenta de sus propios años, va desgastando la madera de los muebles, arrastrando el polvo que se clavan como diminutas uñas en la carne. Tal vez pasemos por delante de esa casa y todavía podamos habitarla, encender la luz de alguna habitación. O tal vez no quede de ella más que una sombra, una madera, un vaso en donde entra el sol.


Aterra pensar que un día no se vuelva a escribir y que lo único que hagamos sea pasear nuestra derrota como náufragos alrededor de una isla que se quedó varada en la orilla. 



martes, 20 de enero de 2015

De los
PROCESOS DE CREACIÓN LITERARIA


Hace poco tiempo en un debate literario - que se podría englobar a todo el terreno literario - surgió una pregunta: ¿Te gustaría saber como o porqué un autor ha escrito tal verso o tal poema?
Y no me refiero a que se nos de una explicación sobre el poema, o se nos <<guíe>> sobre el que pensar o sentir ante un texto. No. Tan sólo me refiero a la realidad que hay detrás de la realidad que el poeta me deja ver. Esa realidad que está antes del verso y es su origen. Esa realidad maternal que inicia una idea, una imagen, un poema.
Hubo discrepancias en las respuestas. Yo personalmente contesté que <<SI>>. Obtuve muchos desacuerdos. Es cierto que ha mucha gente - como la mayoría argumentó - al saber el cómo o el porqué de una obra, se aleja de ésta y sólo es capaz de ver y de pensar en esa realidad originaria, que ahora les parece tan fría y ordinaria que a su juicio desmerecen a la obra. Prefieren mantener cierta buena ignorancia.
Yo por el contrario, y centrándome en la poesía en particular, prefiero el saber. Para mí el conocer esa semilla originaria, y ver que tras esa imagen que ha logrado sacudirme en el poema, está la misma realidad por la que yo, y todos, pasamos cada día, es sin duda una de las sensaciones más extraordinarias que he experimentado - y que sigo experimentado -: es magia. Es la palabra en su estado más virgen. La poesía es magia. Como el pájaro que se posa en la rama de un árbol, una entre tantas ¿Por qué esa? ¿No querríais saberlo?
Para mi el poema no se me nubla, no desmerece. Al contrario. Me conmuevo. A veces lo envidio con ternura. Me siento más cerca del poeta. Y al releer el poema la realidad originaria se desvanece - no como se desvanece cuando no se conoce - se desvanece porque la conozco, y dos realidades - la de todos y la del poeta - no pueden convivir, y yo me quedo con la poesía




martes, 13 de enero de 2015

De mis
CITAS CÉLEBRES

#1

No hay nada humano en la palabra hombre, sino es el hombre quien la nombra
Daisy Villalobos Leal 

lunes, 12 de enero de 2015

De los
PROCESOS DE CREACIÓN LITERARIA 

#1

Tengo en la mano la palabra <<pájaro>>, aún sin escribirla. Espero así el tiempo necesario. hasta que la palabra <<pájaro>> es tan sólo un sonido, y si la pusiésemos delante del espejo no obtendríamos reflejo alguno. Oigo sus seis letras, las seis letras de la palabra <<pájaro>> que ahora resuenan en el aire y su libertad las comunica. y todo tiene algo de pájaro, porque la letra P se repite en todas las<<puertas>>, y todas sus A están también en mi <<ventana>>. Todo lo que existe comparte sus sonidos. Y ahora vuelvo a pronunciar la palabra <<pájaro>> y estoy nombrando todo el mundo. Y en ese misterio de haber perdido el significado impuesto de las cosas, y saber que la palabra es un canto y no una norma, en ese misterio del ciclo vital del lenguaje, habita la poesía.